DOLOR Y MENSTRUACIÓN
De Marianna García Legar (Doña Loba)

Hay una idea imperante que dice que "si te duele la menstruación es que tienes problemas con lo femenino o contigo misma". NO ES ASÍ.

TODAS tenemos que sanar lo femenino en nosotras, y TODAS tenemos que sanar la relación con nosotras mismas, aunque no nos duela la menstruación.

En todo caso habría que pensar porqué nos duele. Pero en vez de pensarlo desde una perspectiva personal (que suele transformar ese dolor en un estigma), habría que repensarlo desde una perspectiva social, e incluso política y económica.

De todos modos yo ahora quería expresar otra cosa: miremos el dolor de otra manera. A algunas de nosotras, si la vida no las tumba, no paran jamás... La mayoría de nosotras estamos sobre estresadas y no nos damos respiro.

Gracias al dolor una mujer así, puede descansar una vez al mes. Dicho de otro modo, ese dolor es útil para ella, la ayuda a hacer lo que necesita, pero no hace: descansar.

SI HAY DOLOR con la menstruación, esto nos obliga a aprender a tratar con el dolor y a gestionarlo. Nos ofrece un entrenamiento con el dolor propio de un guerrero, que es útil para la vida de la mujer.

Por esa característica el pueblo Lakota considera que SÓLO el hombre TIENE QUE hacer la Danza del Sol, en la cual se cuelgan de los cueros del pecho hasta romperlos, para ofrendar la sangre a la Tierra.

Lo hace SÓLO el hombre, porque la mujer ya tiene su propia iniciación en el dolor y su ofrenda de sangre. Es una iniciada y, por tanto, una guerrera reconocida por la tribu.

SI TE DUELE, apaga el teléfono, métete en la cama a oscuras, ponte calor en la barriga, hazte el amor, ten orgasmo, duerme todo lo que puedas, come un poco, descansa a oscuras, ensueña, vuelve a hacerte el amor, ten otro orgasmo, duerme un poco más. Descansa... Déjate llevar... Olvídate del reloj...

Y dale gracias a la Madre de los Dolores por permitirte ese respiro.

SI TE DUELE, sigue al dolor, porque te lleva adonde tienes que estar: ¡a tí misma!